Las páginas web se han convertido en la primera fuente de
información sanitaria para los adolescentes, según un artículo
publicado en Journal of Medical Internet Research. La investigación
también resalta la preocupación de los jóvenes por la calidad de
la información y de los espacios que proporciona la red.
El estudio considera que la necesidad
de adquirir conocimientos sobre salud por parte de los adolescentes,
y el uso de la tecnología proporcionan a los profesionales de la
salud un nuevo camino para acercarse a ellos y ayudarles a conseguir
contenidos de calidad.
Los principales focos de atención en
sus búsquedas se centraron en enfermedades y trastornos de salud
concretos, en tópicos relacionados con la nutrición y la imagen
corporal, en información sobre violencia y satisfacción personal y
en temas de salud sexual.
Según los integrantes del estudio la principal ventaja de internet es que puede realizar consultas en cualquier momento, mientras que el contacto con los especialistas tan sólo puede conseguirse mediante cita.
Por otro lado, la investigación resaltó que las búsquedas se realizan con utilización de una sola palabra y que los jóvenes se cansan pronto a la hora de consultar los resultados aparecidos porque, en su opinión, los motores de búsqueda “generan enlaces a sitios poco relevantes o que no tienen relación alguna con los términos solicitados”. Esta circunstancia crea en los adolescentes una cierta inseguridad en relación con la calidad de los contenidos a la hora de utilizar internet como fuente documental en temas sanitarios.
El uso del correo electrónico a través de todas sus manifestaciones (mensajes, boletines de salud, suscripciones a grupos de apoyo, listas de distribución), es el recurso más valorado por los jóvenes para conseguir información.
El estudio concluyó que el entretenimiento es la principal utilidad que los adolescentes consiguen de las nuevas tecnologías. En opinión de los directores del estudio es preciso que los profesionales de la salud aprovechen este hecho y se creen contenidos que aunen información sanitaria y pasatiempos.
Según los integrantes del estudio la principal ventaja de internet es que puede realizar consultas en cualquier momento, mientras que el contacto con los especialistas tan sólo puede conseguirse mediante cita.
Por otro lado, la investigación resaltó que las búsquedas se realizan con utilización de una sola palabra y que los jóvenes se cansan pronto a la hora de consultar los resultados aparecidos porque, en su opinión, los motores de búsqueda “generan enlaces a sitios poco relevantes o que no tienen relación alguna con los términos solicitados”. Esta circunstancia crea en los adolescentes una cierta inseguridad en relación con la calidad de los contenidos a la hora de utilizar internet como fuente documental en temas sanitarios.
El uso del correo electrónico a través de todas sus manifestaciones (mensajes, boletines de salud, suscripciones a grupos de apoyo, listas de distribución), es el recurso más valorado por los jóvenes para conseguir información.
El estudio concluyó que el entretenimiento es la principal utilidad que los adolescentes consiguen de las nuevas tecnologías. En opinión de los directores del estudio es preciso que los profesionales de la salud aprovechen este hecho y se creen contenidos que aunen información sanitaria y pasatiempos.
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Dra. Karin Andrés
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